Explorando el Impacto de la Inteligencia Artificial y el Diseño Gráfico. Opinión de nuestra Head of Arte en Cebra: Ignacia Chacón.
Con el avance de la tecnología y la Inteligencia Artificial (IA) cada vez más inmersa en nuestras vidas, en el ámbito del diseño gráfico ha generado un mundo de posibilidades y transformaciones. ¿Reemplazará la IA a los diseñadores? En este análisis, desmitificamos este cuestionamiento y exploramos cómo la IA está revolucionando, en lugar de suplantar, la industria del diseño.
En primer lugar, es crucial entender que la IA no busca reemplazar a los diseñadores, sino convertirse en una herramienta poderosa que potencie y agilice nuestro trabajo. Desestimar la necesidad de un diseñador humano en favor de herramientas automatizadas es un error grave. La IA se integra como una aliada, permitiéndonos automatizar procesos y tareas que, de otro modo, consumirían horas de nuestro tiempo creativo.
Un destacado aporte de la IA es su capacidad para automatizar acciones fundamentales en el diseño gráfico. Desde el recorte y dimensionamiento de imágenes hasta la corrección de colores y errores, la IA se convierte en un asistente versátil dentro de herramientas como Photoshop e Illustrator. Digitalizar bocetos, mantener la consistencia del color y aplicar filtros se vuelven tareas eficientes gracias a la automatización proporcionada por la IA.
La IA es una herramienta que interpreta algoritmos matemáticos con el fin de poder tomar decisiones, permitiéndonos una mayor personalización y optimización en el diseño. Al ser capaz de analizar una gran cantidad de datos, la IA contribuye a comprender las preferencias y necesidades de los usuarios. Esta capacidad se traduce en diseños más relevantes y visualmente atractivos para cada usuario específico, identificando tendencias y elementos visuales, que generan un impacto significativo y mejores resultados.
El favorito de todos, un creador de imágenes infinito. ¿Cuánto tiempo invertido buceando por bancos de imágenes? Con los generadores de contenido visual con IA, lo único que necesitas es tener la base de tu idea bien definida (el “prompt”) entregando ciertos parámetros como el tipo de fotografía o imagen, el estilo, la iluminación, etc, la IA nos puede generar imágenes que cumplan con estos criterios, generando varias propuestas para un mismo parámetro, permitiendo editarlo, ampliarlo, etc.
El sueño de contar con un creador de imágenes infinito se hace realidad con los generadores de contenido visual impulsados por IA. Eliminando la necesidad de explorar extensos bancos de imágenes, la IA permite generar propuestas visuales al proporcionar parámetros específicos, como tipo de fotografía, estilo, iluminación, cámara, perspectiva, etc. Este enfoque eficiente brinda flexibilidad para editar, ampliar y ajustar las propuestas generadas.
Aunque la IA desempeña un papel crucial en el proceso de diseño, el rol del diseñador sigue siendo irremplazable. La visión creativa, la coherencia visual, la originalidad, la legibilidad y la visión conceptual son elementos que solo un diseñador puede aportar. La combinación de nuestra capacidad para conceptualizar ideas y proyectos, junto con la eficiencia de la IA en la automatización, nos lleva a resultados asombrosos en Cebra.
En conclusión, la IA no es la amenaza que algunos temen, sino más bien una sinfonía creativa que eleva el diseño gráfico a nuevas alturas. La colaboración entre la mente creativa y la eficiencia algorítmica de la IA es la clave para desbloquear todo su potencial y crear obras maestras visuales que perduren en el tiempo.